Carolina Murillo Arias de Rodríguez ¡Inmemoriam!

Por: Jorge Ancizar Cabrera Reyes.
Nadie muere realmente, mientras haya quien lo ame y lo recuerde.
Murió en la Ciudad de Ibagué, Tolima, la Matrona de Ataco, Tolima, doña Carolina Murillo Arias de Rodríguez, a los 88 años de edad. En su existencia vital se destacó como excelente hija, esposa y madre ejemplar, fue su Padre: don Luis Angel Murillo, su Madre: doña Ana Julia Arias y su Esposo: don Fabio Rodríguez Díaz, ya fallecidos.
La señora Carolina Murillo Arias de Rodríguez deja un gran legado imborrable por sus ejecutorias y expresivo carisma al servicio de la comunidad de Ataco, Tolima, máxime cuando hizo parte de familiares consagrados al desarrollo tecnológico y científico en los campos de la medicina, en las ciencias sociales, jurídicas y en la política.
Doña Carolina Murillo Arias de Rodríguez, mujer, que en vida se destacó como una persona maravillosa, llena de valores cristianos y humanos, alegre, cariñosa, trabajadora y empresaria del comercio y del campo, igualmente, vigorosa y valiente que sacó adelante a sus nueve hijos con tesón, amor y bondad, a ellos les expresamos nuestro abrazo solidario en estos momentos de tristeza y de inmenso dolor, por el deceso de su inolvidable Madre y Ser Querido que les dió amor, cariño, comprensión y los crío y meció en su cuna maternal, condolencias muy sentidas para sus hijas e hijos: Nidia, Leyla, Fabio, Rodrigo, Jairo (Fallecido). Carolina, Sonia, Nelson y Fabiola Rodríguez Murillo, extensivas a sus nietos y nietas, demás familiares, amigos y paisanos de Ataco, Tolima, su pueblo entrañable que amó y por el cual luchó siempre.
De ella, extrañaremos su talante, su ternura y su empuje de mujer acogedora y querida con su amabilidad y sonrisa. Dios recíbala en tus brazos cariñosos y danos la fuerza de tu Espíritu para asimilar y admitir el doloroso paso de la vida a la muerte, ya ella se encuentra en el Gozo del Señor.
Doña Carolina Murillo Arias de Rodríguez, hoy nos deja con mucha tristeza por su partida a la eternidad, y para estar en su despedida final acompañando y unidos a la querida y apreciada Familia Rodríguez Murillo, lo hacemos con el poema "A mi Madre" del poeta de Chiquinquirá, Boyacá Julio Flores Roa: "Todavía el Dolor ara en su frente; /se humedecen sus ojos todavía; /sus ojos, ¡ay! donde también el día /radió como en las cumbres del oriente. /Huyen las tempestades de mi mente / cuando los dedos de su mano fría, /se hunden, temblando, en la melena mía y /amorosos la erizan blandamente. /Ella es el astro de mi noche eterna: /su limpia luz, en mi interior, se expande /como el lampo del sol en la caverna. /Yo la adoro. La adoro sin medida, /con un amor como ninguno, grande: /grande a pesar de que me dio la vida."
Que descanse en la gloria de Dios y paz en la tumba de la inolvidable amiga doña Carolina Murillo Arias de Rodríguez, se le recordará siempre.